sábado, 30 de julio de 2011

Siglo pasado. Censos I

1930  I
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Juan Martínez Villergas XXI

LA CORRUPCIÓN DEL LENGUAJE.

LA LETRA D


El abecedario español consta, si no me equivoco, de veintiocho letras. Constaba, mejor dicho; porque después de que las conveniencias informáticas hayan hecho que la che y la elle sean fonemas en vez de letras, no nos quedan más que veintiséis. Que serán veinticinco el día que, por las mismas razones, se suprima la eñe. A los franceses no les quitarán su cédille; ya veréis como no.                                          .
De estas veintiocho, o veintiséis, o veinticinco, dicen que una, la hache, es muda: se escribe y no se pronuncia. Pues será verdad, pero sólo a medias. Todos sabemos que la tal hache, delante de ue, se convierte en ge: huevo y Orihuela se han pronunciado toda la vida güevo y Origüela. Delante de ie se convierte en y griega: hielo y hierro son yelo y yerro. Andaluces, extremeños y algunos castellanos aspiran la hache hasta convertirla en jota: jartarse, jarapo, jarca... Así ha sido siempre; que no nos vengan ahora con modas nuevas.                                                .

-Entonces ¿en qué quedamos? ¿Es muda, de verdá, la hache?.                                                   .

-Muda, lo que se dice muda, no. Sorda, quizás. La verdadera letra muda del alfabeto español es la de.

-¿Está usté de broma? ¿La de de Dinamarca?                                                   .
-Sí, señor; la de de Dinamarca. Vea: al final de palabra no hay tu tía; es muda sin remedio. Desaparece lisa y llanamente ("¿Qué edá tiene usté?") o se transforma: en ere en los imperativos ("Dejar ya de beber") en zeta en los demás casos ("Toca muy bien el laúz"). Madrid (Madrí, o Madriz para los redichos) pierde la de incluso en plural: "Voy a los Madriles". ¿Localismo, vulgarismo? La chilena Gabriela Mistral (ni provinciana ni inculta: Nobel de 1945) escribió en las notas a Dos himnos: "Si nuestro Rubén, después de la Marcha triunfal y del Canto a Roosevelt, hubiera querido dejar los Parises y los Madriles..."
La mudez es total en las terminaciones ado e ido y en sus femeninos y plurales: "Este joío muchacho nunca está parao." Aquí no hay excepción que valga. El mozo de pueblo os hablará del baile agarrao; el Presidente del Gobierno, de las razones de Estao. Y así todos, desde un patán hasta un Ministro, aunque a veces la diferencia se note poco. (1) La mudez puede ser incluso contagiosa: en la terminación ada arrastra y engulle a la última a. Tajada no es tajaá, sino tajá.                                                  .

-María Moliner dice que los finales en ado pecan de cierta afectación.                                          .
-No sé por qué. La afectación está en nuestras orejas, que han perdido el hábito de oír buen castellano. ¿También le parecen a usted afectados los nombres de oficio acabados en dor? Pues acuérdese de Rita la cantaora. O del afilador de mi pueblo; cuando andaba calamocano y con la verticalidad insegura, reformaban para él una vieja canción:                                          .


Son tus ojos azules
como las olas de un mar sin sol,
y tu cuerpo se cimbrea
como el tío Juan el afilaor.

¡Pero, hombre! ¡Si hasta el toro que mató a Joselito se llamaba Bailaor!

-En los finales de palabra, la ley fonética del menor esfuerzo...
-Déjese de teorías, que lo que digo vale también para los principios. Detrás de se convierte en tras eliminando las des y, claro está, sus vocales compañeras. El adelante tampoco se libra: "Navarra siempre p'alante", canta la jota. "¡Tós p'alante!" gritaba Pirri, el ceutí. Navarra y Ceuta, Norte y Sur: el fenómeno no se circunscribe a la meseta. Fíjese en las calles: nadie va a la Calle de Alcalá o a la Puerta del Sol: la gente va a la Calle Alcalá o a la Puerta'l Sol. Y esto ha llegado también a los rótulos: Calle - Cordonerías, Plaza - Castilla...

-A los rótulos de las calles, en estos tiempos, les ha pasado de todo...
-Iba a decírselo yo, pero ésa es otra historia; vamos a lo nuestro. Mire el prefijo negativo des. Usted, que es rural y pueblerino como un servidor, habrá oído siempre esparramar, estripaterrones, espabilao... Siempre el aféresis dichoso.

-Espabilado está ya en el Diccionario.
-A la fuerza ahorcan. También hubo que admitir escote, espeluznar, esposado y otros muchos vocablos que siempre tuvieron su de. Pero a mi pueblo no vaya usted a pedir una destraleja; no le entenderán. Pida una estraleja. Y de ésas, mil.

-En los pueblos, tal vez. Pero en el lenguaje literario...
-En el lenguaje literario, Gabriel y Galán, salmantino injertado en Cáceres, no puso ni una de en sus Extremeñas. Luis Chamizo, el que cantaba a "una raza de castúos labraores extremeños", quitó la de hasta del título del libro: "El miajón de los castúos". Vámonos a Murcia; allí está Vicente Medina con "los sarmientos ruïnes y mustios, y esnúas las cepas..." de su Cansera.

-Me cita usté tres poetas dialectales.
-En seguida le citaré uno que no lo era, pero desengáñese: la de es una consonante dental débil, comodona y suave. Por eso languidece, y acabará mal: como todos los débiles. Es una letra muerta. Inútil. Innecesaria. Juan Martínez Villergas, agudo poeta satírico del siglo XIX, no la precisó para escribir su célebre epigrama:

Varias personas cenaban
en un ventorro barato,
y a una chuleta miraban
que, sola al fin en el plato,
como es usual respetaban.
Uno la luz apagó
para agarrarla sin bulla,
y al ir a cogerla halló...
cien manos más, y la suya,
pero la chuleta no.

-Pero... ¡Villergas no lo escribió así!

-¡Ah, no? ¡Caramba! Pues entonces...¿de dónde diantres, demonios o diablos desenterré dicha disparatada décima?
Blas PUNTORREDONDO

lunes, 25 de julio de 2011

Fantasía en el mus I

Continuará...
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La iconografía aplicada a cada uno es totalmente aleatoria. No tiene ni "primeras"   ni   "segundas". 
No obstante si alguien se ve incómodo con alguna, no hay problema...  lo dice y se le "transporta"  la cara.

domingo, 24 de julio de 2011

Instantáneas XII

     Sobre fauna: UNO MUERTO:  En la cuneta de la carretera que une Gomeznarro con Ramiro yacía este Milano Real,  del que es dificil determinar la causa de ello. ¿Habrá intentado obtener el carné de piloto?. Pudiera ser, aunque muy improbable. ¿Habrá ingerido algún alimento en malas condiciones?. Pudiera ser.  ¿Habrá sido por chocar contra cables de alta tensión?. Pudiera ser aunque por allí el riego es con motores de gasoil. ¿Habrá sido por causas naturales?. Pudiera ser.
 
 
Milvus milvus
 
 
El Milano Real tiene el privilegio de ser la más elegante de nuestras rapaces y una de las aves más características de nuestra fauna. Su área de distribución cubre la mitad de Europa y sectores de Africa del Norte, pero no se encuentra en ninguna otra parte del mundo.
Buen velero y normalmente poco arisco, ofrece el espectáculo fascinante de su absoluta maestría en el aire. Durante las paradas nupciales la pareja acompaña sus acrobacias veleras con dulces relinchos: «hiou-hiou-hiouou». El nido es un buen montón de ramas, guarnecido de tierra, lana, musgo y toda clase de trozos de papel e incluso de plásticos.
Con frecuencia el Milano Real forma parte de las partidas de carroñeros que recorren los campos a la espera de reses muertas; junto a los cadáveres se le ve con buitres, córvidos y su pariente el Milano Negro, con el que compite fuertemente por los lugares de nidificación, en determinados emplazamientos, ya que, en general, el Milano Negro es mucho más abundante y común en época de cría. Sólo en invierno, a causa de las muchas aves de su especie que llegan de otros puntos de Europa, puede verse al Milano Real por todas partes.

Identificación: Plumaje castaño rojizo con cabeza blancuzca listada; cuerpo grácil; alas estrechas, agudamente acotadas hacia atrás en vuelo; cola profundamente ahorquillada; hembra ligeramente más oscura.
Nidificación: Ambos sexos construyen nido de palos y tierra, en árbol, frecuentemente en nido antiguo de córvido; puesta, de marzo a mayo, usualmente 2 ó 3 huevos blancos con motas rojo acastañadas; incubación, de 28 a 30 días sólo por la hembra; los pollos alimentados por ambos padres, dejan el nido después de unos 50 a 55 días.
Alimentación: Pequeños mamíferos, conejos, carroña, aves jóvenes, a veces lombrices y ranas.

viernes, 22 de julio de 2011

Hasta siempre Teodoro

     Se ha marchado hoy, para siempre, el TENDERO DE GALLINAS. Ya hacía años que no nos traía ultramarinos a la puerta de casa, pero año tras año le hemos visto celebrar el cumpleaños con  su familia a la vez que departía afablemente con cualquiera que le saludara, demostrando su bondad y caballerosidad.
     Dentro de unos días hará seis años que nos decía a todos los de Gomeznarro, en su calidad de Pregonero de las Fiestas de 2005:

     “Es justo rendir un recuerdo a tantas clientas y buenos amigos, que ya no están con nosotros. Los que tanta confianza tenían en mí y yo en ellos. Eran años más difíciles, yo compartía con ellos sus problemas y sus alegrías, como si fuera uno más de la familia, por eso quiero a este pueblo de Gomeznarro”.

   Sirva esta reseña, si queremos ser justos, para rendirle nuestro último Homenaje y recordar que este pueblo también le quería.  Y trataremos de hacer realidad su último consejo, también en el pregón:
      “No os canséis nunca de ser buenos.” 


 Hasta siempre Teodoro

Instantáneas XI

Sobre fauna: Uno MUERTO. En el arcén de la carretera yacía este zorro del que es dificil determinar la causa de ello. ¿Habrá intentado obtener el carné de conducir?. Pudiera ser. ¿Habrá ingerido algún alimento en malas condiciones?. Pudiera ser. ¿Habrá sido por causas naturales?. Pudiera ser.

ZORRO (Vulpes vulpes)
© David Díez Frontón

DESCRIPCIÓN DE LA ESPECIE

El zorro es el mamífero carnívoro más abundante del planeta  y se encuentra distribuido por todo el hemisferio norte, de modo que en Eurasia habita desde la Península Ibérica y el Norte de Marruecos hasta el Japón, por el Norte tiene el límite en la zona de los hielos, donde le sustituye el zorro ártico y por el Sur, en África, el zorro del desierto. En Norteamérica se extiende desde el Norte de México hasta el Ártico. Aunque también habita en Australia, se trata de ejemplares procedentes de una introducción que tuvo lugar a final del S. XIX para intenta combatir la plaga de conejos que sufría el continente, los que a su vez habían sido objeto de una previa reintroducción. 
Existen numerosas razas y subespecies locales. Según los países y zonas geográficas varía también la coloración del pelaje. El de España ofrece matices grises, ocres y rojizos, mientras que el de centro Europa es de una coloración en la capa más pardo rojiza y en países como Marruecos es de un color rojo más brillante, pero las patas y la cara externa de las orejas son siempre de tono negro más o menos intenso y la cola suele presentar una mancha en la punta de color blanco o negro.
 
El zorro alcanza casi el metro de longitud, destacando en su figura la cola de unos 35 cms. de larga. La cabeza la tiene ancha, el hocico puntiagudo y las orejas son grandes y puntiagudas.
 
El zorro es un animal curioso e inteligente que sin embargo por su naturaleza sospechosa y tímida, les obliga a evitar el peligro. Es un animal generalmente solitario, aunque también pueden vivir en parejas permanentes o en grupos de un macho y dos o tres hembras, generalmente emparentadas entre sí y con una jerarquía establecida entre ellas. A partir de la época de celo, la que depende mucho de los lugares en que vive, aunque normalmente se sitúa a comienzos del invierno,   el zorro vive emparejado hasta que los cachorros comienzan a salir de la madriguera, momentos hasta el que permanece junto a la hembra llevando alimentos tanto para la madre como para los cachorros.
 
El zorro es un buen corredor, nada con soltura y puede trepar a los árboles con relativa facilidad. El olfato lo tiene muy desarrollado, considerándose el mejor de sus sentidos, el que agudiza durante la noche. El oído está también muy desarrollado y con él puede localizar presas que emiten sonidos de baja frecuencia. La vista la tiene bien adaptada a la visión nocturna, aunque también ve perfectamente durante el día. Cuando corre puede alcanzar una velocidad punta de 55 Kms/hora, siendo la habitual la de 6-10 Kms./h. (Castells y Mayo, 1993). Emiten una amplia gama de sonidos, los que utiliza para comunicarse con otros congéneres, siendo el más característico y conocido una especie de Wau... Wau.

Este cánido no hiberna, aun cuando en el invierno se refugia en cuevas, generalmente conejeras que agranda para su uso, mientras que en verano prefiere encamarse entre las matas. La máxima actividad la alcanza en el crepúsculo y en la noche, pudiendo efectuar desplazamientos en busca de caza de hasta 40 kms. los machos y 15 Kms. las hembras.
 
El zorro es muy territorialista, para lo que utiliza tanto la orina como el marcaje con sus glándulas anales, plantares y caudales:
 
-         Glándulas anales. La secreción olorosa más importante, lo que el confiere el característico olor a zorro que percibe el hombre, procede de las glándulas anales, también llamadas subcaudales, las que se sitúan en número de dos bajo la cola, a ambos lados del ano.
 
-         Glándulas plantares. Se localizan entre las almohadillas plantares de las cuatro extremidades e impregnan un honor específico a sus huellas.
 
-         Glándulas caudales. Se localizan en la parte alta de la cola, a muy pocos cms. del lomo. También reciben el nombre de glándulas violeta, de las que nace un característico mechón de pelo oscuro, diferente del resto del animal. Su misión no está bien estudiada y puede tener un marcado carácter de identificación específica de los individuos dentro de la familia. 
 
 
El zorro es un animal que tiene fama universal de astuto, silencioso y discreto, condiciones que revela todos los actos de su vida y  que les han permitido sobrevivir a los continuos ataques y persecución sin tregua de que viene siendo objeto, particularmente por los daños que inflinge en las piezas de caza menor y su costumbre de introducirse en los corrales, donde ocasiona verdaderos estragos, aun solo se lleva un ejemplar de los muchos que mata cada vez; esta costumbre no obedece a pura ferocidad, sino a su inclinación a cazar cuando se le presenta una ocasión favorable (Willian G. Foster, 1972). El zorro no mastica su alimento, sino que lo traga entero. En libertad, cuando matan a más animales de los que puede consumir en el momento, entierran el alimento adicional en escondrijos. Estos escondrijos los hace el zorro excavando con las patas delanteras, colocando el alimento en su interior al que empuja con la nariz al fondo, para después taparlo con tierra. Los zorros, además de carnívoros, consumen frutas, desempeñando un importante papel en la dispersión de las semillas vegetales.
 
Los zorros ocupan una amplia gama de habitat incluyendo bosque, tundra, pradera y tierras de cultivo, aun cuando el habitat preferido es el que cuenta con una diversidad de la vegetación, próximos a áreas suburbanas.
 
Muy criticada ha sido el impacto del zorro sobre las especies cinegéticas, lo que para algunos especialistas se encuentra en revisión. Así en julio de 1998 se presentó en el Congreso Euroamericano celebrado en Santiago de Compostela (Pere Ortín, 1999) una ponencia portuguesa con el título de “Impacto del zorro en las especies cinegéticas pequeñas. ¿Cierto o solo un cuento?”. En el trabajo se analizaban 24 áreas de estudio concluyendo que “el impacto del zorro es solo relativamente alto en las zonas en las que tienen una población significativamente importante de este tipo de especies de caza menor (conejos y perdices) si bien se considera que los zorros no son importantes depredadores de especies de caza menor, por lo que su eliminación no mejora la población de especies cinegéticas pequeñas. Considerándose por el contrario un error desde el punto de vista ecológico la eliminación de zorros”. Se ha apuntado al propio hombre, con la proliferación de basureros, como el responsable del aumento de la población de zorros en los últimos años.    

jueves, 21 de julio de 2011

Instantáneas X

 Esta fotografía 
o  cuadro está al revés. 
Una de dos, 
o yo la he colocado equivocadamente
o el artista ha pintado
los árboles contranatura...

Pero no, va a ser...
la de tres: 
Es un detalle 
del paisaje siguiente,
por supuesto de 
Gomeznarro


miércoles, 20 de julio de 2011

Instantáneas IX

Sobre fauna: Uno VIVO, observado y tratado con cariño por la infancia de Gomeznarro. Nerea, sin miedo, se acerca al ERIZO.


Martes, 19 de Julio de 2011

© Juan José González Ahumada
ERIZO COMÚN O EUROPEO
(Erinaceus europaeus)
DESCRIPCIÓN DE LA ESPECIE
  
El erizo común o europeo es el insectívoro de mayor tamaño de Europa, pudiendo alcanzar hasta los 30 cms. de longitud y superar 1 Kg. de peso. Con patas cortas, aspecto rechoncho y el dorso dotado de características púas o espinas de unos 3 cms. de longitud, es un animal de aspecto y forma inconfundible. Se trata de un animal de hábitos nocturnos, que raramente sale de su escondrijo hasta 1 ó 2 horas después de esconderse el sol, para retirarse de nuevo  antes de que amanezca. Devora insectos, lombrices, pequeños reptiles e incluso huevos, ratones y pequeños mamíferos, dieta a la que añade frutos, especialmente en la temporada que más abundan éstos.
Al final del otoño, normalmente cuando la temperatura media baja de los 10º C, el erizo busca un agujero escondido y abrigado entre piedras o bajo las raíces de un árbol donde se hace una bola y queda sumido en un profundo letargo que se prolonga hasta la llegada de la primavera, bajando sus latidos de las habituales 180 pulsaciones minuto hasta las 20, al tiempo que también baja su temperatura corporal para adaptarla a la ambiental, situándola en torno a los 5º C (Castells y Mayo, 1993). Este sueño invernal no es continuo a lo largo de toda la época fría, sino que puede verse interrumpido y sale al exterior en los días más soleados y calurosos, momento en que se vuelve torpe y pesado, como si estuviera medio dormido. Esta es la mejor ocasión para fotografiarlo, al permitir acercarnos a él a muy poca distancia.
El erizo es un buen andarín, pudiendo moverse con rapidez en un área que puede variar entre las 5,5 y las 102,5 has. (Boitani y Reggiani, 1984), también es un buen nadador y tiene un olfato muy desarrollado.
Fuera de la época de reposo el erizo solo acondicionar más de un nido, del que cambia con frecuencia, para evitar el acoso de depredadores y pasar más desapercibido.
 El erizo común se extiende por casi toda Europa, alcanzando por el norte el sur  de Noruega, Suecia y Finlandia, en la Península Ibérica tan solo falta del sur, donde es reemplazado por el erizo moruno (Atelerix algirus) de menor tamaño y peso que esta especie. 

Instantáneas VIII

Espectacular atardecer en nuestro querido Gomeznarro. Fotografías captadas y cedidas por Miguel Ángel García para disfrute de todos.
(Para verlas a pantalla completa, pulsar sobre ellas)